Saludos de nuevo.
Tras casi un mes de abandono casi absoluto, volvemos a sentarnos tras el teclado.
Son numerosas las cosas que podía contaros hoy, desde una entrevista de trabajo en la que me sentí cómodo para una empresa de energías renovables, hasta que hace escasas horas he estado tirado en la m-30.
Pero acabando julio es cuando empieza mi verano, al menos cuando empieza la parte más interesante de mi verano. Y es que tras presentar la tesina fin de master la semana pasada en la que me enfrenté a un tribunal menos hóstil de lo esperado y en el que la gente que asistió me minusvaloró pensando que el tribunal podía haberme "pillado" si se ponía a preguntarme y en el que yo estaba absolutamente convencido tener respuestas para todo, bien no la correcta, bien no la que se esperaba que respondiera, pero lo que sí que tenía claro es que debía defender mi trabajo como fuera, aunque no fuera del todo bueno, aunque allí se expusieran trabajos de nivel y aunque los nervios, por momentos, llegaran a atenazarme, lo último que podía dejar notar allí era inseguridad.
Y una vez superado ese trámite, ahora es que cuando de verdad, estoy ocioso. El viernes parto a París, una semana escasa de turismo leve, pues ya conozco París y en la que espero no suframos mucho calor. ¿Después? Después voy a Portugal, 10 días de playa y turismo. Y entremedias, intentaré convencer a mi novia para irnos a la playa unos días, pero de esto último no puedo asegurar nada.
Y después de agosto qué? es una buena pregunta, hace un año justo estaba en la misma situación que ahora, sin saber qué hacer con mi futuro a corto plazo. Hace un año, me preocupaba más que ahora, hoy por hoy, me preocupa menos, al final saldrá algo. Y es que si algo he aprendido es que quien teme al futuro no aprende del presente.
Pero lo reconozco, tengo esperanza en recibir una oferta de trabajo en breve. Prometo informar.
Ahora, y dado la época en la que estamos, gin tonic fresquito en la mano y brisa de playa de ambiente. Imaginar eso y disfrutar de esto:
Cuidarse.
