jueves, 19 de septiembre de 2013

Giving is the best communication

Buenos días:

 Con el verano listo para acabar y con la vuelta a la rutina, hay poco que comentar. Sigo en espera de una oportunidad laboral pero sin perder el ánimo.

 Pero hoy no es para hablar de nada. Simplemente para compartir algo. Y es que la vida está para disfrutarla, y sobre todo, para ser feliz. Y ayudar al resto a ser feliz.

 Os dejo este anuncio, sé que es tan solo un anuncio pero el mensaje que esconde es ley de vida. Y ejemplo. Y lo bueno hay que compartirlo.



Cuidarse

miércoles, 4 de septiembre de 2013

La crisis segun Einstein

 Parece que el mundo nunca ha sufrido una crisis, que estamos en un agujero negro y que nunca vamos a salir de él. No debemos engañarnos, la historia del mundo, la historia del ser humano es cíclica, el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra.

 Las crisis no son nuevas, nuestros antepasados las sufrieron y las generaciones venideras las sufrirán, es ley de vida.

 Un ejemplo claro, nos lo deja Albert Einsten, he aquí su reflexión:

 "No pretendamos que las cosas cambien si siempre hacemos lo mismo. La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países porque la crisis trae progresos. La creatividad nace de la angustia como el día nace de la noche oscura. Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis se supera a sí mismo sin quedar "superado".

 Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las soluciones. La verdadera crisis es la crisis de la incompetencia.El inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones. Sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia. Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora que es la tragedia de no querer luchar por superarla".

 Es palabra de genio.

 "La verdadera crisis es la crisis de la incompetencia". Conviene no olvidarlo.

 Cuidarse.

martes, 3 de septiembre de 2013

Compadre

Disculpad que no haya dado noticias, pero hasta hoy la pereza del verano se ha apoderado de mi.

 No me gustan los sesgos informativos que se producen en los medios de comunicación, nos tratan de tontos...sin ir más lejos, muchos de vosotros habréis oído hablar de la reducción de un 10 % de los muertos en carretera en verano. Pero ese 10 % ¿respecto a qué? Ahh, claro, respecto a los muertos del año pasado. Me gustaría que sacaran el ratio muertos/nº viajes. Probablemente nos echaríamos a temblar. Al parecer ha habido 3.000.000 menos de desplazamientos que el año pasado. Llamadme iluso pero un parque móvil envejecido como el español y el abandono de los firmes de las carreteras me hacen dudar muy mucho de que ese ratio sean tan "esperanzador" como nos quieren vender.

  Tras los meses de verano, la mejor noticia es que estemos todos de vuelta, cada uno con sus labores y que todo siga igual.

Sin una mísera oferta de trabajo que llevarme a la boca e intentando sacarme los cuartos de donde puedo.

 Pero no es momento de lamentarse, de resignar y de mirar a otro lado. Es momento de poner buena cara al mal tiempo y de esforzarse porque las cosas cambien.  Soy optimista. Sí, pese a todo, soy optimista.

 Y dado que ha llegado el momento de lamerse las heridas y recompenerse, hay que hacerlo con vitalidad y optimismo, y para ello la música es un gran aliado.

 Entre tanto, ya estoy matriculado del curso "Análisis de riesgos aplicado a la gestión de seguridad de presas y embalses". Ya sabéis, mi incierta creencia en que una buena formación me llevará a un buen puesto de trabajo. Iluso de mi. Entre tanto no espero nada, porque el que espera desespera.

 Ahh!!y de la esperanza en la oferta de trabajo que os comenté, sin noticias.

 Sin embargo, mi teléfono ha empezado a sonar con algunos alumnos que tuve el año pasado interesándose nuevamente por mis clases. Lo dicho, no puedo quejarme, mi verguenza personal me lo impide.

 Ahora, toca disfrutar con Siempre Así

 

 Cuidarse.