Domingo noche

Saludos de nuevo:
Si yo fuera una persona normal, ahora debería estar cayéndome de sueño, sin embargo, mi sueño es bastante limitado....El motivo por el que debería estar durmiendo y no lo estoy es un fin de semana de bastante desfase. Como creo que aun tardaré en dormirme aprovecho para contaros algunas cosas.

LLegados a domingo noche, creo que es menester hacer reflexión de todo lo acontecido en los últimos días. Para empezar, una entrevista que ya comenté aquí, un bochorno pero que me sirve para aprender. Al día siguiente, como anuncié tenía exámen. Me levanté el jueves sin poder moverme, no podía abrir los ojos y la tormenta más oscura se cernía sobre mí, por suerte, mi examen era por la tarde, asi que, a la hora del mismo me dirigí a la escuela sabiendo de antemano que en esas circunstancias la cosa no podría ir muy bien. Tras 4 horas y media de examen, me monto en el coche camino de casa pensando que soy retrasado, siendo un examen para un notable mínimo, salgo del mismo pensando que se debe dar un milagro para que yo apruebe ese examen, es normal si vas a un examen de la carrera sin una concentración mínima, y estas más pendiente de tu picor de ojos, de no manchar de lágrimas el examen o de los pinchazos en tu cerebro que de atender a los ejercicios del mismo. En esas llegué a casa, cené y me acosté, me insistieron para tomar una cerveza pero tengo un caracter tal, que si preparo una cosa y no me sale bien, me siento defraudado conmigo mismo, siento que he fallado y mis ánimos no son demasiado elevados. Lo dije en la presentación del blog, las cosas o se hacen bien o mejor no se hacen. En palabras de un blogero asiduo a leer éste, y ante un 9 en un trabajo de máster "está bien, pero yo lucho por la excelencia", esa es mi misma filosofía de vida, sabiendo mis limitaciones, sé, y lo sé, que el examen del jueves de Resistencia de Materiales tenía que haber salido diciendo que luchaba por el sobresaliente y salí pensando que la había liado. Sin embargo, suspenda o no el examen, he aprendido ciertas cosas de aquello que seguro me sirven para la próxima vez

Mi fin de semana, estaba predestinado de antemano, así que, aun pensando que no debería haberme permitido esos lujos, salí los dos días, el viernes con la gente de la escuela y sus parejas y el sábado con mis amigos de toda la vida. Mis horas de llegada son intempestivas, 7:45 a.m el viernes, 8:30 el sábado. Se me fue de la manos totalmente, pero la Posada de las ánimas me retuvo de manera inconsciente hasta que me echaron de aquel lugar.

Mención aparte merece la cena del sábado en mi casa, en la que nos reunimos bastante gente, y sobre todo, gente que no veía hacía tiempo y que me gustó volver a ver. Esas reuniones de amigos son las que creo que nos mantienen vivos, nos hacen ver que hay buena gente por el mundo y nos hace desconectar de nuestros exámenes basura o de nuestras entrevistas de bochorno; así que desde aquí gracias a todos por venir.

Lo único malo del finde semana fue que uno de los grandes de la noche, perdió sus llaves, hoy me ha tocado volver al sitio con él en busca de algo imposible. Lo posible se consigue, lo imposible se intenta. No ha habido suerte, quizá mañana la diosa fortuna nos sonría mínimamente.

Sin embargo, a domingo noche, no sé hasta que punto me compensan estos fines de semana, evidentemente me lo paso genial, y estoy deseando que se repita, pero, lo que sí tengo claro es que lo más importante ahora mismo es sacar el curso medianamente decente, y ante primer examen "importante" golpe en la frente. Creo que ha sido una cura de humildad que necesitaba.

Mañana es lunes, y aunque no sea el día, tengo dardos. Última semana lectiva del año que espero aprovecharla mínimanente. Empiezan esas fiestas que tan poco me gustan, pero que es inevitable poner buena cara. Para la mayoría son días felices, para mi son días más tristes que alegres.

Mis horas de sueño en este fin de semana han sido bastante escasas, asi que creo, que aunque tarde en dormirme, lo mejor será que me acueste y espere que mañana vuelva a sonar el despertador.

Cuidarse.